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Me tomó 30 años no solo normalizar mi color de piel y aceptarme sino amar mi condición de mujer afrodescendiente, valorar cada rasgo de mi ser, mi cabellera como símbolo histórico de libertad y la riqueza de mi cultura, dejando a un lado la aspiración de encajar rechazando mi esencia en una sociedad que aun nos discrimina.
“Ser mujer y negra no es fácil, pero con esto no busco victimizarme”
Busco alzar mi voz por todas esas mujeres que no tienen esta valiosa oportunidad.
Si miro atrás, cuando yo era niña no me gustaba que me encasillaran como la “Negrita del colegio”, algunos se burlaban de mi color de piel, de mi pelo y de mi bemba colorá, mis familiares con buenas intenciones me insinuaban que debía mejorar mi raza. Cuando somos niños este tipo de acciones nos hiere, afectan y silencian, se necesita de un proceso para convertir esas experiencias en fortalezas.
Hoy a mis 45 años considero que me ha hecho crecer compartir espacios donde he podido expresar mis ideas siendo yo misma. Y es justo en esa libertad donde veo la oportunidad de promover y garantizar los derechos de participación, que en edades tempranas se inculque el valor de nuestra esencia, haciéndolos sentir parte, decirles que ser negra no está mal, aunque sean las únicas en una habitación.
¿Cuál es la situación de las mujeres afrodescendientes en Latinoamérica?
Según la División de Asuntos de Género de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), las desigualdades múltiples vividas históricamente por las mujeres afrodescendientes hacen parte de un complejo sistema de discriminación estructural legado por el pasado colonial esclavista.
- En este siglo persisten múltiples formas de discriminación contra las niñas y mujeres, y estas con frecuencia se agravan cuando se analizan desde la perspectiva étnica.
- Todavía existen profundas inequidades frente a otros grupos sociales.
- Padecen de la pobreza en niveles que suelen ser más altos que el resto de la población, están subrepresentadas o ausentes en los procesos de toma de decisiones y ven más vulnerados su derecho y el de sus comunidades de vivir una vida libre de violencia.
¿Por qué es importante visibilizar a la Mujer Afrodescendiente?
Encontrar soluciones efectivas en contra del racismo, la discriminación y el sexismo que aun aqueja a esta población es un objetivo mundial, por eso es necesario visibilizar la lucha de la mujer negra.
Como mujer afrodescendiente me uno a esta causa y con este artículo pretendo generar mayor conciencia sobre los desafíos que asumimos las mujeres negras a la hora de conquistar aspiraciones profesionales.
Es fundamental garantizar la autonomía de las mujeres afrodescendientes en estas tres dimensiones, autonomía física, económica y en la toma de decisiones.
Puede simbolizar un gran avance en la vida de todas las mujeres de la región, ya que las afrodescendientes ocupan los más bajos niveles de la pirámide social y las consecuencias de estos progresos impactarán toda la estructura social de los países de América Latina y del Caribe.
En este mes se celebra mundialmente a la mujer afrodescendiente, le rindo un homenaje a todas las mujeres que han contribuido desde sus ámbitos personales y laborales a forjar sociedades más justas, equitativas, generando cambios sociales y luchando contra la violencia, el sexismo y la exclusión, conservando y resaltando sus costumbres a nivel internacional.
Espero inspirarte, con miles de historias, con experiencias ajenas y propias para que sepas que eres dueña de tu historia, que no estas sola, que puedes encontrar una red que te apoye, llámese familia, amigos o un mentor. Únete a nuestra comunidad en instagram de Girls Con Power queremos acompañarte en el camino de soñar en grande.
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